Mi esposa tiene una hermana menor muy hermosa que acaba de llegar del campo. Pidió quedarse en nuestra casa unos días mientras esperaba los resultados de su solicitud de empleo en una empresa cercana. Desde que la conocí lo primero que me impresionó fue su trasero regordete, que además fue algo sumamente dañino que me cegó y me llevó a caer en un amor incestuoso con mi cuñada. Ella es una mujer tranquila, por lo que no fue una sorpresa que cuando le propuse la idea de una satisfacción fisiológica para ambos, ella aceptó de inmediato. Cuando mi esposa está durmiendo y fuera de casa, a menudo tenemos relaciones sexuales. Hicimos el amor en todos los lugares de la casa, desde la cocina, la sala hasta el baño... mi cuñada incluso accedió a dejarme correrme dentro de ella.
En mitad de la noche bajó a la cocina y le apretó el culo a su cuñada.
